Los protagonistas participan en un proyecto en el cual se fomentan los valores de convivencia democrática inclusiva que han acompañado estos juegos a lo largo de la historia.

Las personas con discapacidad intelectual aprenden a vivir juntas, a colaborar e interactuar con otros, a compartir experiencias positivas de los juegos europeos tradicionales. Al mismo tiempo, esta experiencia también es positiva para las personas sin necesidades especiales que confirman el papel extraordinariamente inclusivo de los juegos tradicionales en la sociedad actual.

El proyecto combina teoría y práctica: la experiencia de practicar juegos tradicionales y el enfoque científico para identificar evidencia sobre el impacto inclusivo del bienestar socioemocional de esta experiencia.

Este proyecto permite construir un puente en la interacción entre los diferentes actores: Participantes (estudiantes, maestros, educadores, investigadores), Familiares y Organizaciones involucradas en la socialización del diálogo intercultural.

Una parte importante de los protagonistas (con y sin discapacidades) compartirá los roles de jugador, árbitro y "monitor" explicando las reglas del juego a otros participantes. Estas experiencias compartidas fomentan el desarrollo de la efectividad personal de los participantes, promoviendo el empoderamiento y la resiliencia como recursos inclusivos para optimizar el diálogo intercultural inclusivo.

Los participantes, entrenadores, maestros, investigadores, adultos y jugadores con y sin discapacidad intelectual compartirán una relación intercultural basada en el apoyo mutuo y la convivencia pacífica inclusiva.

Es un proyecto que promueve el diálogo intercultural inclusivo al estimular el encuentro y la comunicación entre personas de diferentes orígenes y características culturales, mejorando la diversidad cultural y desarrollando una actitud activa en la búsqueda de espacios comunes para favorecer la transformación de visiones.